A la entrada de una tienda de recuerdos, que ahora gustan en llamar "de souvenirs", tres fuentes me escupían agua, pensé que fotografiar a la mayor de ellas persuadiría a las otras de continuar con su ofensa, pero... que otra cosa podrían hacer, ¡son fuentes!
Una de las "extrañas" farolas mujer-dragón que iluminan las noches del Alcázar segoviano.
Toda gran ciudad tiene una pequeña parte.
Quizás no tan conocido como el de Toledo, lugar que admiro sobremanera, este es para mi, el más impresionante de los que pude ver hasta hoy; las vistas desde el río son impresionantes, otorgándole ese aire a lo "castillo de cuento" dificilmente igualable.
El acueducto de Segovia.
Por y para ti, porque me inspiras.
Torre del Oro, a orillas del Guadalquivir.
Flores, en el Monasterio de la Cartuja, Isla de la Cartuja (Sevilla).
La Real Maestranza de Sevilla, única plaza de toros en el mundo cuyo ruedo es ovalado y no redondo como es costumbre, construido así en su día por falta de espacio suficiente.
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Giralda vista desde el emblemático barrio sevillano de Santa Cruz, y debajo uno de sus rincones más entrañables.
Típico coche andaluz de caballos, en Sevilla..
un mismo ecosistema donde conviven el pasto seco y las más hermosas flores.
Abandonada por el tiempo y la dejadez, sus vias aun son paso obligado de trenes de mercancias.
